Restaurantes para ir con niños en Madrid
Los mejores restaurantes en Madrid para comer con niños
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En Madrid hay múltiples opciones para salir a comer en familia. De hecho, hay restaurantes y cafeterías que ofrecen un servicio de calidad y un menú especialmente pensado para los niños. Lo mejor es que existen sitios para todos los bolsillos, por lo que también es posible encontrar restaurantes muy económicos. Si estáis buscando un buen sitio para comer o cenar con niños en Madrid, te proponemos algunas ideas.
10 restaurantes para disfrutar en familia en Madrid
1. Kilómetros de Pizza
Se trata de un restaurante que está dando mucho de qué hablar en Madrid. Su plato principal es la pizza, pero no cualquier pizza: unas pizzas colosales de hasta dos metros de largo que conjugan hasta cuatro sabores diferentes en una sola pieza. Lo mejor es que son elaboradas con ingredientes completamente naturales que descansan sobre una masa muy suave y crujiente que hará las delicias de los más pequeños. También hay pizzas de tamaño normal que cuentan con ingredientes 100% de origen italiano. Hay pizza margarita, barbacoa, cuatro quesos, estación de Nápoles y diavola. El espacio es muy acogedor, cuenta con una terraza urbana donde los más pequeños pueden salir a jugar e incluso, justo enfrente tiene un parque infantil.
2. Filandón
La máxima de este restaurante es: “El campo en la ciudad”. Su proximidad al Monte de El Pardo, uno de los montes mediterráneos mejor conservados de Europa, hace que Filandón sea un restaurante que aprovecha, como ningún otro, la rusticidad del entorno para conjugarla con la especialidad de su carta. Sin duda, se trata de un sitio perfecto para disfrutar de una cena familiar en contacto directo con la naturaleza. De hecho, cuenta con un amplio terreno donde los más pequeños pueden correr y disfrutar de las áreas verdes, así como un área que incluye columpios, toboganes y muchos otros juegos. No obstante, su mayor reclamo es una carta exquisita que incluye platos como las croquetas de la abuela, la morcilla de León, el pulpo a la Gallega, el calamar de anzuelo y las verduras de temporada.
3. Gobu Burger
Se trata de un innovador restaurante madrileño que apuesta por un nuevo concepto en el que fusiona las deliciosas hamburguesas que los niños adoran con los platos más tradicionales de la comida española. El restaurante tiene un diseño muy desenfadado y cálido que os hará sentir a gusto. Obviamente, su mayor reclamo es su exquisita carta en la que incluyen platos que van desde la ensaladilla rusa, las patatas bravas, la cecina de león y las croquetas de jamón, setas y cabrales hasta platos a base de solomillo de buey. También cuentan con un menú infantil en el que hay hamburguesas con queso y bacón o pollo acompañados con patatas fritas y como postre, helado. No obstante, recordad que su especialidad son las hamburguesas: hay hamburguesas con vegetales, con distintos tipos de queso, de pollo y de pescado.
4. Mamá Campo
Se trata de un complejo culinario que se erige en la Calle Trafalgar y que incluye un restaurante y una cantina de tapas, situados en los alrededores de la Plaza Olavide, así como un espacio dedicado a los más pequeñitos de casa, La Cocinita. Este espacio tiene un diseño muy personal y delicado que transmite una sensación de calidez única, no en vano fue galardonado con el Premio Metrópoli al local con la mejor decoración en 2014. De hecho, si decidís apostar por este restaurante para comer con los niños, podréis disfrutar de una cena realmente ecológica, elaborada con productos recién salidos de la tierra. Sin embargo, Mamá Campo no tiene grandes pretensiones más allá de que os sintáis a gusto disfrutando de los platos españoles de toda la vida con un toque renovado. Por eso, su mayor atractivo es una carta en la que podéis encontrar desde las clásicas patatas bravas, la ternera en salsa y el huevo castizo con presa ibérica hasta el mollete de rabo de ternera, los montaditos de barbuquejo de cerdo y los minutejos de Mamá Campo.
5. Costello Río
Si estáis paseando por Madrid Río y os entra hambre, esta es la opción perfecta. Es un restaurante que cuenta con diversos espacios para que disfruten lo mismo un grupo de amigos que una familia con niños. Tiene el salón principal y una barra para las comidas más informales, así como algunas mesas junto a las ventanas para que los pequeños puedan entretenerse mirando hacia afuera mientras comen. Además, ofrece un menú muy variado con platos que van desde el bisonte, el lechón y el fiordo, hasta los nachos camachos y los crujientes de pollo. También tiene exquisitas hamburguesas, batidos y patatas fritas para los más pequeños. Y para que cerréis con broche de oro la cena os prepararán algunos dulces que le harán la boca agua a los niños: tortitas con nata, tarta de queso y galleta, torta de chocolate de la abuela y tarta de manzana.
6. La Excéntrica
Si estáis buscando un lugar para una comida informal en familia, esta taberna os vendrá como anillo al dedo. Podréis degustar una opípara cena o picotear algunas tapas madrileñas, aunque en su menú sobresalen los platos confeccionados con carnes y pescados de primera calidad. No obstante, también podréis encontrar brochetas de ternera, tacos mexicanos, tortilla española y ensaladas frescas, además de berberechos, croquetas caseras y deliciosas paellas. La taberna cuenta con un espacio para que los peques puedan entretenerse mientras los padres terminan de cenar y los fines de semana ofrece un servicio de niñera para que podáis disfrutar tranquilamente de la sobremesa.
7. La Almazara
Este restaurante, ubicado al sur del centro de Madrid, es perfecto para salir a comer con los más pequeños de casa. De hecho, cuenta con diversos espacios muy bien decorados en los que podréis disfrutar lo mismo de un aperitivo que de una cena más formal. Además, tiene una zona de juegos donde los niños podrán divertirse que incluye un parque de bolas, camas hinchables, toboganes y un área exclusiva para que dibujen, hagan manualidades y pintacaras, todo bajo la supervisión de una monitora que los cuidará mientras hacéis la sobremesa. El menú es sencillamente exquisito e incluye una amplia gama de platos capaces de satisfacer los gustos más diversos, que van desde la fabes a la asturiana, la mariscada cocida y el surtido de ibéricos hasta el entrecot de lomo de ternera, la hamburguesa de buey y el confit de pato. También cuenta con una carta de postres caseros en la que sobresalen propuestas tradicionales como arroz con leche, natilla, flan, macedonia de frutas naturales y helados. Además, el menú infantil incluye la bebida y el postre. Y para que los pequeños no se lamenten, podrán disfrutar de hasta dos horas en la zona de juego sin costo adicional.
8. El Latigazo
Situado en una de las áreas más bellas de la zona norte de Madrid, este restaurante ofrece un servicio exclusivo con vistas al Monte del Pardo. No importa si decidís cenar en la terraza al aire libre, en la sala White, en el salón de la Pinacoteca o en el salón Principal, tendréis la oportunidad de deleitaros con una exquisita gastronomía y un servicio muy profesional que os dejarán con ganas de regresar. Sus platos, confeccionados a capricho, cuentan con ingredientes de primera calidad que sorprenden siempre por sus atractivos sabores y diseños originales. Hay ofertas para todos los gustos, desde croquetas y bacalao hasta magret de pato laqueado y entrecot a la parrilla. Además, usualmente organizan actividades de animación con payasos, magos, pintacaras y castillos hinchables, de las que pueden disfrutar los niños mientras los padres degustan tranquilamente su cena.
9. La Familiar
“Niños entretenidos, papás felices” es la filosofía de este restaurante situado en un entorno privilegiado, muy próximo al Monte del Pardo. Para ser fiel a ese principio, cuenta con un espacio exclusivo para los peques dotado de piscina de bolas, pizarras, juegos hinchables, mesas para pintar y mucho más, bajo la supervisión de monitores profesionales que se encargarán de cuidar a los niños mientras sus padres degustan tranquilamente la comida. Por supuesto, también tiene un menú infantil que incluye desde lomo de ternera con pasta de colores y espaguetis boloñesa hasta pez rebosado con arroz, y de postre leche merengada, brownie, tronco de frambuesas y turrón y ensalada de frutas. Y para que los adultos también disfruten la experiencia, tienen platos exquisitos como la carrillera de ternera al chocolate, el bacalao confitado con ajo negro, la crema de calabaza con quenelle de nueces y picatostes, el cochinillo confitado al Oporto y el lomo de buey trinchado a la parrilla.
10. Alejandre
Si estáis buscando un sitio donde tanto vosotros como los niños os sintáis a gusto, este es el restaurante perfecto. Uno de sus mayores atractivos es su amplia carta, que incluye desde parrillada de verduras, setas Alejandre y ventresca de atún rojo en aceite de oliva hasta arroz con bogavante, chuletón de carne blanca de Ávila, lascas de foie al vino de Oporto, chuletas de cordero lechal y el famoso steak tártaro. Sin embargo, Alejandre no solo cuenta con una carta llena de platos únicos para cautivar a los paladares más exquisitos sino que también ofrece un espacio para que los niños se entretengan después de comer. Hay una zona lúdica con parque de bolas, laberinto con obstáculos, mini-campo de fútbol y baloncesto y un área con videoconsolas, todo bajo la supervisión de monitores que se encargarán de convertir ese rato en una experiencia divertida.
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