Educación

Conjunciones: ¿Qué son y cómo se clasifican?

Las conjunciones explicadas para niños con ejemplos

[mashshare icons=»1″]

Conjunciones
Jennifer Delgado

Jennifer DelgadoEducadora, psicóloga y psicopedagoga

Las conjunciones no son uno de los primeros contenidos que los niños aprenden en clase de Lengua, pero sin duda, son una parte importante dentro de la oración que deben dominar. Gracias a estas palabras es mucho más sencillo estructurar oraciones largas y conferir un sentido a frases que, de otra manera, no serían más que una suma progresiva de términos incoherentes. Por eso, es fundamental que los niños conozcan qué son las conjunciones y aprendan a identificarlas dentro de la oración.

¿Qué son las conjunciones?

Las conjunciones no son más que un tipo de “palabras invariables, generalmente átonas, cuyos elementos manifiestan relaciones de coordinación o subordinación entre palabras, grupos sintácticos u oraciones”, según la Real Academia Española de la Lengua. En otras palabras, se trata de un grupo de palabras que funcionan como nexos para unir palabras y oraciones. De esta manera, no solo facilitan el lenguaje, sino que le confieren un sentido a lo que se dice.

Este tipo de palabra no tiene género ni número, es decir, que no admiten flexión. Se trata de morfemas independientes sin un significado léxico cuya principal función consiste en expresar las relaciones entre los diferentes elementos que conectan.

Los principales tipos de conjunciones

Las conjunciones pueden clasificarse de distintas maneras, teniendo en cuenta la función que desempeñan dentro de la oración. Por lo general, existen dos tipos principales de conjunciones:

1. Conjunciones coordinantes o propias

Se refiere a aquellas conjunciones que vinculan palabras, sintagmas u oraciones a un mismo nivel sintáctico o categoría gramatical, es decir, cuando los elementos que conectan pueden intercambiarse sin perder su significado. Como sucede, por ejemplo, en el caso de “En el mercado había calabacines y cebollas” ya que sería lo mismo decir “En el mercado había cebollas y calabacines”.

  • Copulativas. Permiten juntar en una sola unidad dos elementos del mismo tipo, indicando acumulación o suma de elementos. Entre las conjunciones coordinantes más utilizadas se encuentran: y, e, ni, que, no solo, tanto… como, así… como, igual… que, lo mismo… que, ni… ni, sino también y cuanto.
  • Disyuntivas. Permiten relacionar dos términos en una relación excluyente u optativa, es decir, en la que se debe elegir uno de los dos. En otras palabras, denotan separación, diferencia o alternativa entre dos o más personas, cosas o ideas, como en el caso de las conjunciones: o, u.
  • Adversativas. Permiten enlazar dos términos en una relación antagónica, o sea, de contrarios, en la que se contradice el uno con el otro. Denotan oposición o diferencia, entre la frase anterior y la que sigue. Algunas de las conjunciones adversativas más comunes incluyen: pero, mas, empero, sino, aunque, sin embargo, no obstante, antes, antes bien, por lo demás.
  • Explicativas. Permiten juntar proposiciones o términos que apuntan a lo mismo, pero que al estar juntos propician una mejor explicación de lo dicho, o refuerzan un significado. Básicamente, son conjunciones donde el primer elemento de la coordinación es aclarado por el segundo. Son conjunciones explicativas: es decir, esto es, o sea, mejor dicho, es más.
  • Distributivas. Son conjunciones coordinantes que denotan la alternancia de opciones compatibles, es decir, permiten unir de manera discontinua dos elementos, repartiendo su significado a lo largo de una misma oración. Básicamente, reparten el sentido oracional en dos términos diferentes. Son conjunciones distributivas: ya… ya, bien… bien, unas… otras, uno… otro, tanto… como, sea… sea, siquiera… siquiera.

2. Conjunciones subordinantes o impropias

Son aquellas que enlazan proposiciones u oraciones que no son intercambiables entre sí, ya que al unirse se establece entre ellas un significado específico. Esto porque uno de los términos tiene una mayor jerarquía que el otro. Las conjunciones subordinantes degradan la oración en que se insertan y la transponen funcionalmente a una unidad de rango inferior que cumple alguna de las funciones propias del sustantivo, adjetivo o adverbio. Esto puede verse en el ejemplo, “Esa noche llovía, de modo que me tuve que ir en autobús”.

  • Sustantivas. Cumplen el rol de un sintagma nominal dentro de la oración. Introducen oraciones que desempeñan las funciones propias de un sintagma nominal y se clasifican de acuerdo a la función que desempeñe la oración sustantiva dentro de la oración principal. Entre las más comunes se incluyen: que, de que, cómo, cuánto.
  • Adjetivas. Se introducen con un pronombre relativo que es el que actúa como nexo. Cumplen el rol de un sintagma adjetival, o sea, caracterizan a un nombre. Algunos ejemplos de este tipo de conjunciones incluyen: quien, el cual, el que, cuyo.
  • Adverbiales. Cumplen el rol de un sintagma adverbial ya que introducen información contextual, ya sea de circunstancia (tiempo, lugar, modo o comparación) o relación lógica (causa, consecuencia, condición, finalidad). Entre estas conjunciones destacan: cuando, donde, como, según, más que, porque, aunque, caso que, a menos que.
  • Causales. Se trata de conjunciones subordinantes que expresan causa, como por ejemplo, porque, como, dado que, visto que, puesto que, pues, ya que.
  • Condicionales. Se refiere a conjunciones que expresan condición o necesidad de que se verifique alguna circunstancia. Entre ellas se incluyen: si, como, si no, a menos que, en caso de que, siempre que, con tal de que, a condición de que, como.
  • Concesivas. Son un tipo de conjunciones subordinante que expresa concesión. Son conjunciones concesivas, aunque, aun, aun cuando, a pesar de que, si bien, así, por más que, por mucho que, siquiera, bien.
  • Consecutivas. Se trata de aquellas palabras que introducen una oración en la que se muestra la consecuencia de algo que antes se cuantificó. Algunos ejemplos son: tan, tanto… que, conque, así pues, luego, así que, de modo que, de manera que, de forma que, por lo tanto.
  • Finales. Se refiere a aquellas conjunciones subordinantes que denotan el fin u objeto de lo manifestado anteriormente. Por ejemplo, para que, a fin de que, con objeto de, con la intención de que.
  • Temporales. Son conjunciones subordinantes que expresan tiempo, como por ejemplo, mientras, mientras que, cuando, antes que, después que, aún no, luego que.

Conjunciones ejemplos

Ejemplos de conjunciones para facilitar el trabajo a los niños

He aquí algunos ejemplos de conjunciones que puedes presentarles a los niños para que aprendan a identificarlas y encuentren su función dentro de la oración.

  1. No pidió comer ni beber nada en particular.
  2. Fui a ver la película cuyo póster vimos en la calle.
  3. Como hiciste ayer, debes poner de tu parte.
  4. Hoy comeremos fuera, a menos que quieras cocinar.
  5. No solo lo recibimos en casa, sino también le conseguimos un trabajo.
  6. Ellos invirtieron en acciones, en cambio nosotros invertimos en divisas.
  7. O dejan de pelear, o se va cada uno para su cuarto.
  8. Salí de casa cuando empezaba a llover.
  9. Me dijo que eso era todo, o sea, que yo estaba despedido.
  10. Nadie se atreve a acercarse a la casa debido al perro que la custodia.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *