Salud

Difteria en niños: Todo lo que debes saber

Qué es, síntomas y tratamiento de la difteria infantil

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Síntomas difteria en niños
Jennifer Delgado

Jennifer DelgadoEducadora, psicóloga y psicopedagoga

Hace tres años se presentó en España el primer caso de difteria infantil desde 1987. Hasta ese momento se pensaba que la enfermedad se había erradicado en el país, cuando en realidad estaba agazapada esperando la menor oportunidad para volver a atacar.

Por suerte, se trata de una patología muy poco común entre los niños ya que desde que muy pequeños se les inmuniza contra la bacteria que la provoca. A pesar de ello, es importante que los padres conozcan en qué consiste esta enfermedad, cuáles son sus causas, los signos que alertan de su contagio y, sobre todo, cómo pueden prevenirla.

¿Qué es la difteria?

Básicamente, la difteria es una infección aguda causada por la bacteria Corynebacterium diphtheriae. Dicha bacteria se propaga a través de las secreciones de la tos o los estornudos de las personas infectadas hasta llegar al organismo del nuevo huésped. Una vez allí, coloniza las mucosas de la nariz y la garganta, inflamándolas y formando una especie de membrana grisácea, dura y fibrosa, que se adhiere a las mismas, lo que dificulta la respiración.

Cuando la bacteria se empieza a reproducir en las mucosas produce una toxina que puede llegar hasta el torrente sanguíneo, diseminándose por el resto del cuerpo y afectando algunos órganos como los riñones, el corazón, la piel o el sistema nervioso. Vale destacar que condiciones ambientales como los entornos de hacinamiento y la falta de higiene son los principales factores de riesgo que facilitan la propagación de la bacteria, que afecta sobre todo a los niños que no están inmunizados.

difteria sintomas

Los síntomas que caracterizan a la difteria

El período de incubación, es decir el tiempo que transcurre desde el contagio con la bacteria hasta la aparición de los primeros síntomas, suele tardar entre dos y cinco días tras la infección. Por lo general, los primeros síntomas empiezan afectando al aparato respiratorio, para luego extenderse a otros sistemas. En esta etapa es común que aparezca:

  • Dificultad respiratoria
  • Respiración rápida
  • Secreción nasal acuosa o con sangre
  • Tos
  • Fiebre y escalofríos
  • Dolor de garganta
  • Molestia o dolor al deglutir
  • Coloración azulada de la piel
  • Babeo constante

Una vez que la toxina que produce la bacteria ha entrado en el torrente sanguíneo, la difteria se convierte en una enfermedad muy seria ya que puede comprometer a varios órganos. Por ejemplo, puede provocar inflamación del músculo cardiaco, más conocida como miocarditis, lo cual provoca a su vez otras alteraciones como palpitaciones, aumento de la fatiga o incluso, una parada cardíaca. También puede causar parálisis musculares, lo que se traduce en dificultades para hablar, tragar o caminar, así como daños renales y lesiones cutáneas.

¿Cómo tratar la difteria?

Los expertos coinciden en que la mejor forma de tratar la difteria es previniéndola. Para ello, basta que el niño sea inmunizado con la vacuna contra la difteria, el tétanos y la tosferina que se incluye dentro del sistema de vacunación nacional y que se aplica a los 2, 4 y 11 meses y luego, al año, a los seis y a los doce años de edad.

No obstante, si un niño enferma de difteria, es importante acudir lo más rápido posible a los servicios de salud. Tras confirmar el diagnóstico, los médicos procederán a administrarle al pequeño la antitoxina diftérica y luego tratarán la infección con antibióticos como la eritromicina o la penicilina.

En los casos más serios, es probable que el pequeño tenga que quedarse hospitalizado en observación para monitorear sus funciones respiratorias y cardiacas. Asimismo, deberá mantener reposo en cama hasta que la infección haya pasado y esté libre de todo peligro.

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