Salud

Piénsalo 2 veces antes de hacer cosquillas a tus hijos

[mashshare icons=»1″]

Cosquillas
Mª José Roldán

Mª José RoldánMaestra y Psicopedagoga

Las cosquillas son una forma que muchos padres utilizan para buscar el acercamiento físico con sus hijos. Producen risa y momentos de diversión en familia, pero, ¿es tan bonito como parece? En realidad, las cosquillas cuando duran poco y son aceptadas por el receptor, no tienen nada de malo, siempre y cuando se pare en el momento en el que quien recibe las cosquillas pide que quien las hace se detenga.

La risa ante las cosquillas es automática, por lo que no siempre significa que a un niño o a una persona adulta le guste lo que le están haciendo aunque se esté riendo. Las cosquillas pueden ser tremendamente molestas para algunas personas, sobre todo para aquellas a las que les cuesta mantener cercanía física con los demás.

Si te pide que pares, para

En el caso de que un padre no se detenga cuando su hijo le pide que lo haga, la cosa cambia. Si un padre sigue haciendo cosquillas a sus hijos sin que éstos las quieran, solo les está transmitiendo el peligroso mensaje de que un adulto tiene el poder sobre su cuerpo a pesar de que él quiera resistirse. Parece demasiado alarmante, pero es buena idea tener esto en mente para que, si deseas hacer cosquillas a tu hijo, respetes su decisión de parar en un momento determinado.

De esta manera, si paras cuando te lo pide, le estarás transmitiendo un poderoso mensaje: él tiene el poder sobre su cuerpo y decide sobre él. Los niños pueden disfrutar de un momento de cosquillas, pero también pueden resultar molestas y por eso, es importante que tengan el control de saber cuándo se debe parar. El adulto tiene más fuerza física por lo que es quien tiene que parar.

cosquillas peligrosas

El lado oscuro de las cosquillas

Como hemos apuntado más arriba, las cosquillas no tienen por qué ser divertidas. Pueden ser una verdadera tortura y para nada algo inofensivo. La risa aunque en la gran mayoría de ocasiones es placentera, cuando se provoca por las cosquillas genera mucho estrés en las personas. Con las cosquillas las personas pierden el control sobre su cuerpo y el organismo entra en estado de tensión, fatiga y ansiedad.

En China, hace unos 1800 años se utilizaba como método de castigo para los criminales o traidores porque no dejaba marcas y la recuperación parecía sencilla. También fue utilizada este tipo de tortura en otras épocas en Japón sin misericordia a cualquier criminal.

En Roma también se utilizaba una forma similar. Los criminales debían soportar que una cabra les lamiese los pies. Aunque parezca una broma, esta técnica se utilizaba como tortura porque llega a ser insoportable y dolorosa, en ocasiones incluso, provocaba muertes por derrames cerebrales provocados por el estrés que este tipo de risa provoca en el organismo.

En la Segunda Guerra Mundial, los nazis también usaban este método de tortura en sus prisioneros hasta llevarles a la muerte. La muertes por risa pueden provocarse por asfixia, derrames cerebrales o estrés agudo. La persona pierde el control sobre su cuerpo y no puede controlar correctamente su respiración. Dependiendo de la intensidad y del tiempo que esté forzado a reírse las consecuencias pueden ser fatales. Hay personas que se mueren por ataques de risa, por lo que es necesario conocer las consecuencias tan horribles de las cosquillas.

Con precaución

Una vez llegados a este punto es posible que pienses que nunca más le volverás a hacer cosquillas a tus hijos, ¡no es necesario ser tan radical! Solo es importante tener en cuenta que si tu hijo te dice que pares, le hagas caso porque debe recuperar el control de su cuerpo y además saber que es él quien decide.

Hacer cosquillas durante unos segundos no tiene por qué ser malo, pero recuerda que puede que no sea agradable para quien está recibiendo este contacto físico. Si quieres tener una cercanía física con tus hijos… ¡Un abrazo es más saludable y mucho más placentero!

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *