Salud

Por qué un niño tiene comportamientos anti sociales

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Por qué un niño tiene comportamientos anti sociales e1460190547112
Mª José Roldán

Mª José RoldánMaestra y Psicopedagoga

En ocasiones los niños pueden tener comportamientos antisociales y los padres al ver esto pueden preocupar bastante pensando que quizá hay algo que no va bien con sus hijos. Los comportamientos antisociales de los niños puede deberse a muchos factores, incluyendo la crianza abusiva, la incapacidad de relacionarse con los demás, porque tienen problemas emocionales o quizá por baja autoestima.

Hay niños que en algún momento de su vida pueden experimentar ocasionalmente tendencias anti-sociales pero pueden ser temporales y que no les influya en su desarrollo. Pero los comportamientos problemáticos que puedan haber o ante cualquier cambio de comportamiento, será necesario que se trabajen lo antes posible para que no vayan a más. Los niños que tienen comportamientos anti sociales podrían estar en riesgo de desarrollar trastornos de personalidad antisocial más tarde en la vida.

Además, es necesario poder valorar las posibles causas que pueden estar desencadenando el comportamiento antisocial para poder buscar las soluciones lo antes posible y que el niño o niña pueda volver a tener un buen estado emocional y sentirse de nuevo equilibrado.

Acoso por exclusión

Quizá los niños que tienen un comportamiento antisocial pueden intimidar a otros física o emocionalmente para crear un desequilibrio de poder. Estos niños podrían obligar a otros a hacer cosas embarazosas o causar dolor físico.  También los grupos de niños pueden demostrar comportamientos antisociales si se excluyen de otros niños, si hacen comentarios hirientes o si difundes rumores de otros niños. O también un niño que se comporta de forma anti social puede ser que lo haga para defenderse de los acosadores y no tener contacto con otros niños que pudieran hacerle daño.

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Agresiones físicas a los demás

Si bien no es raro que los niños pequeños sean algo agresivos cuando se sienten frustrados, los padres podrían tener motivos de preocupación cuando las conductas agresivas continúan más allá de los primeros años de vida. Los comportamientos antisociales en los niños pueden incluir patadas, puñetazos, golpes o pegarse con otros niños (compañeros o hermanos) e incuso con los adultos. Mientras que la mayoría de los niños empiezan a desarrollar la empatía y son capaces de ponerse en el lugar del otro para encontrar soluciones alternativas a los conflictos, los niños con tendencias anti sociales no pueden desarrollar esta empatía si no es con un trabajo emocional previo.

Aislamiento por falta de regulación emocional

Los niños que tienen incapacidad para manejar el estrés podría retraerse socialmente y aislarse de sus iguales y familiares. Los niños que están socialmente aislados podrían parecer perezosos, apáticos o tener más irrritabilidad que otros niños con mejor manejo del estrés. Incluso podrían sufrir el rechazo por el resto de los iguales a causa de no saber regular sus comportamientos por lo que causarían malestar emocional a los otros. Los niños que no han tenido interacciones normales con sus iguales debido a alguna enfermedad o a algún otro tipo de característica, no habrán aprendido las competencias sociales adecuadas como para poder relaciones con los demás y tendrán más tendencia al aislamiento. En este caso, necesitarán una orientación profesional para poder desarrollar estas habilidades.

 En este sentido cuando los niños presentan comportamientos antisociales, en la mayoría de los casos representan problemas emocionales más profundos que no se deben dejar pasar por algo.  Los padres deberán ponerse en contacto con el pediatra si se sienten preocupados por el comportamientos antisociales. Estos comportamientos también pueden incluir mentiras, manipulación, la impulsividad o los riesgos innecesarios. La terapia familiar e individual es necesaria para poder disminuir el riesgo de trastornos de personalidad antisocial más tarde en la vida. Incluso si un niño es diagnosticado con este trastorno, con intervenciones terapéuticas se podrían encontrar el tratamiento adecuado.

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