Educación, Salud

Técnicas y estrategias para ayudar al niño hiperactivo

Cómo ayudar a un niño hiperactivo en casa

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Cómo ayudar a un niño hiperactivo en casa
Jennifer Delgado

Jennifer DelgadoEducadora, psicóloga y psicopedagoga

¿Cómo lograr que el niño haga los deberes sin que se entretenga? ¿Qué puedo hacer para que mejore sus calificaciones en la escuela? ¿Cómo lograr que escuche cuando se la da una orden?

Estas son algunas de las preguntas más habituales que se plantean los padres de un niño que sufre un Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad. De hecho, estos niños suelen ser difíciles de manejar ya que son impulsivos e inquietos y les cuesta concentrarse en una sola actividad. También tienen problemas para esperar su turno en una conversación o en una fila y a menudo olvidan o pierden las cosas, simplemente porque no estaban prestando atención. Sin embargo, con las estrategias adecuadas, estas dificultades se pueden solventar. Cómo ayudar a un niño hiperactivo en casa.

El manejo del niño con hiperactividad en casa

Adopta una actitud adecuada

A menudo los padres no se dan cuenta pero sus respuestas ante los comportamientos del niño son determinantes ya que pueden fomentar conductas inadecuadas. Por ejemplo, si has cedido ante una rabieta, concediéndole lo que quería, el niño interpretará que enfadarse es una vía válida para obtener lo que desea. Como resultado, las rabietas serán cada vez más frecuentes. Por tanto, mantener la calma y ser firme en las decisiones es fundamental.

Premia las buenas conductas

Cuando el niño exhibe determinados comportamientos y las consecuencias son agradables, esa conducta se reforzará. Al contrario, si no recibe un refuerzo positivo, terminará extinguiéndose. Por eso, debes premiar sus buenos comportamientos. Puedes recurrir a palabras de aliento, abrazos, chuches o algún juguete. Sin embargo, es importante que dosifiques los premios para que el niño no se sienta motivado solo por estos. Puedes crear un tablón de puntos que refleje sus logros y, cuando alcance una cifra previamente pactada, puedes darle una recompensa.

Enséñale a concentrarse

Para la mayoría de las personas, mantenerse concentrados en una tarea es algo natural pero para los niños con TDAH no es así, por lo que tendrás que enseñarle a focalizar la atención. En este sentido, el modelo de autoinstrucciones es muy eficaz ya que, básicamente, se trata de guiarle para que pueda centrarse en los aspectos importantes de la actividad, ignorar los estímulos irrelevantes y planificar paso por paso la tarea. En un primer momento deberás modelar esta técnica, para que el niño la entienda. Se trata de que hagas preguntas como: ¿Qué tengo que hacer? ¿Cómo lo voy a hacer? ¿Cuáles son las posibles soluciones? Y que después, indiques los pasos, mientras los vas ejecutando. En un primer momento, el niño tendrá que repetir los pasos en voz alta, después en voz baja y finalmente podrá mentalizarlos.

Estrategias para ayudar al niño hiperactivo

Enséñale a evitar las distracciones

Durante las primeras semanas, es probable que tengas que sentarte con tu hijo a hacer los deberes pero poco a poco, debes ir dejándole su espacio. La idea es que le enseñes a reconocer los estímulos que le distraen, para que sea él mismo quien los evite. Se recomienda que el lugar donde haga los deberes sea tranquilo, lejos de estímulos que puedan llamar su atención.

Ten paciencia

Algunos padres se desesperan cuando comienzan a poner en práctica estos consejos y no obtienen los resultados que esperaban. Sin embargo, lidiar con el TDAH es cuestión de perseverancia y mucha paciencia. Por ejemplo, si tu hijo no está más de 5 minutos sentado a la mesa, el primer paso será que se quede 6 minutos, luego 7 y así sucesivamente, hasta que logre cenar sin levantarse.

Sé constante

Los niños necesitan un entorno estructurado para sentirse seguros y confiados. En el caso de los niños hiperactivos, esta necesidad se sobredimensiona, por lo que es importante que establezcas una serie de horarios y reglas que se deben cumplir. No olvides que la inconsistencia educativa tiene repercusiones muy negativas en su desarrollo por lo que si has establecido determinadas normas, sé firme en su cumplimiento. No te enojes con el pequeño, habla con voz suave pero firme y si no entiende el mensaje o lo ha olvidado, vuelve a repetirlo pacientemente.

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