Educación

Cómo aplicar los castigos a los niños

Nunca hay que perder el respeto y la empatía aunque se empleen los castigos

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Castigos para niños
Jennifer Delgado

Jennifer DelgadoEducadora, psicóloga y psicopedagoga

No vas a salir en toda la semana por haber sacado malas calificaciones.
Si no vienes a cenar ahora mismo, no verás el televisor en toda la noche.
Si no haces los deberes, no vas a ir al cumpleaños.

Estas son tan solo algunas de las frases más frecuentes que los padres usan para chantajear a sus hijos, emplean el castigo como una forma de extorsión con el objetivo de que se comporten adecuadamente. Por supuesto, no se trata de una buena estrategia educativa, aunque se debe aclarar que el castigo en sí mismo no es negativo, al contrario. Todo depende de cómo se aplique. El castigo, adecuado a la edad y en proporción al daño causado, puede ser educativo, pero el castigo desproporcionado unido a la violencia física o verbal puede dejar profundas secuelas psicológicas.

Para aplicar el castigo correctamente no basta con prohibirle al niño realizar una de sus actividades preferidas o pedirle que haga una tarea que no es de su agrado. Si lo aplicamos de esta forma, el castigo es solo un correctivo. Sin embargo, su principal objetivo es que el niño comprenda su error y reflexione al respecto. Solo así tendrá un efecto educativo y se transmutará en buenos hábitos de conducta.

Asimismo, el castigo debe ser tan solo una estrategia educativa más, no la única forma que los padres emplean para enseñar al niño pues de lo contrario, irá perdiendo su efectividad. De hecho, si se castiga al niño con frecuencia, terminará acostumbrándose a este método. Por tanto, el castigo se debe utilizar solo cuando otras estrategias, como el reforzamiento de conductas positivas, la reflexión y el llamado de atención, no han funcionado.

El castigo en los niños de 0 a 5 años

Antes de los 5 años el niño no es capaz de reflexionar mucho acerca de su comportamiento pues sus nociones sobre lo que está bien o mal son muy difusas. Por eso, de nada vale que le castigues durante varias horas, un castigo corto y concreto funcionará mucho mejor. De la misma forma, no debes posponer el castigo sino que este debe emplearse inmediatamente después de la conducta inadecuada pues de lo contrario el niño no comprenderá la conexión entre su comportamiento y el correctivo.

Para castigar a un niño de esta edad será suficiente con que le retires un juguete, sobre todo si este ha estado relacionado con la conducta negativa. Otra alternativa es pedirle que vaya a un lugar tranquilo donde no pueda realizar ninguna actividad para que piense durante un rato. Para llamar su atención debes utilizar un tono de voz serio y firme, los niños pequeños suelen ser muy sensibles al tono de la voz y logran captar a través de este lo que no pueden comprender con las palabras.

Aplicar castigos infantil

El castigo en los niños de 6 a 12 años

A esta edad lo más importante para el niño es el juego y la socialización con sus amigos. Por tanto, se le puede castigar prohibiéndole los videojuegos, navegar por Internet o salir a divertirse con sus amigos. Sin embargo, al contrario de lo que muchos padres piensan, no es necesario que el castigo se extienda a lo largo de toda una semana.

Cuando el castigo se aplica adecuadamente, es suficiente con un día ya que a esta edad los niños han desarrollado una buena capacidad de razonamiento y han adquirido una serie de nociones morales que les permiten reflexionar sobre su comportamiento. De hecho, se recomienda que antes de aplicar el castigo, le expliques por qué está siendo castigado y qué ha hecho mal.

El castigo en los niños de más de 13 años

A esta edad el niño es casi un adolescente y, aunque el castigo sigue funcionando, se debe complementar con otras técnicas de educación, que suelen ser mucho más efectivas, como la negociación y el diálogo. Como a esta edad lo más importante es la autonomía y la relación con los amigos, el castigo deberá estar dirigido a limitar esas actividades.

Sin embargo, en la adolescencia es fundamental explicar las razones del castigo, el tiempo que durará y sus reglas. También es esencial que, una vez aplicado, se cumpla a cabalidad, si el adolescente se percata de que el castigo es flexible, no lo respetará.

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