Educación

15 proverbios chinos para fomentar valores en los niños

Los refranes y los proverbios son pequeños fragmentos de texto que enseñan mucho a nuestros hijos

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proverbios chinos
Nuria Capdevila

Nuria CapdevilaMaestra y pedagoga

Los valores, las emociones y las lecciones de vida son lo que más nos cuesta enseñar a nuestros hijos, ya que se tratan de conceptos abstractos con los que no van a saber trabajar hasta la etapa de las operaciones formales de su desarrollo. Esta etapa, que no llega hasta aproximadamente los 12 años, es la que les permite trabajar con conceptos que no pueden ver ni tocar. Y, a esta edad, son ya muchos los valores que los niños deben haber aprendido. Entonces, ¿qué podemos hacer? Pues, usar todos los recursos que tengamos a nuestro alcance y, uno de ellos, son los proverbios.

Proverbios chinos para educar a los niños en valores

Los proverbios chinos son de los más intensos, claros y certeros con los que nos podemos encontrar en la vida y, sino, ya nos lo diréis cuando leáis los que os hemos seleccionado. Seguro que van a cambiar la manera en la que veis muchas cosas y, lo mejor de todo, es que podéis utilizarlos para enseñar a vuestros hijos importantes lecciones de vida.

1. “Dale un pez y le alimentarás solo un día. Enseña a pescar y se librará del hambre durante toda la vida”

Este proverbio nos invita a enseñar a la gente, a transmitir nuestros conocimientos para que puedan interiorizarlos y sacar provecho de ellos. Si solo damos un pez a una persona, comerá este día. Únicamente, este día. Sin embargo, si le enseñamos cómo se pesca, le estaremos dando una forma de sobrevivir toda la vida.

2. “Las oportunidades no suceden solas, tú las creas”

Todos tenemos sueños en la vida y queremos que nos pasen cosas buenas, llegar a cumplir nuestros objetivos. Los niños, en particular, tienen muchos sueños y objetivos. Sin embargo, no podemos dejarles pensar que las cosas pasan porque sí. Es necesario entender la importancia del esfuerzo para llegar dónde deseamos.

3. “El que hace el bien de los demás, hace el suyo”

En la vida todo vuelve y cuando hacemos algo bueno para una persona, este bien vuelve a nosotros. Nos sentiremos mejor como personas y solo por vivir esta sensación, ya merece la pena haber ayudado. Además, ¿qué hay de malo en buscar la manera de sacarle una sonrisa a la gente? ¡No cuesta nada! Y, ayudarles, tampoco.

4. “Cuando bebas agua, recuerda la fuente”

Este proverbio nos habla de la necesidad de ser agradecidos con aquellos que nos ayudan. Nunca debemos aprovecharnos de nadie y debemos agradecer todo lo que nos dan.

5. “Cuanto más grande es el caos, más cerca está la solución”

A medida que nos vamos acercando a nuestros sueños, el camino se hace más arduo. Pero, a cuanto más difícil sea, mayor y más cerca está la recompensa.

6. “Si haces planes para un año, siembra arroz; si los haces por dos lustros, planta árboles. Pero si haces planes para toda una vida, educa a una persona”

La educación es la pieza clave en la vida. Sin educación, no hay futuro. Por ello, es necesario invertir en ella, tanto los papás como los niños. Un buen futuro se debe trabajar, ya que nadie regala nada. Pero, con una buena educación, la vida siempre es más fácil y el trabajo más agradecido.

7. “Cuando te inunde una gran alegría, no prometas nada a nadie; cuando te inunde un hondo pesar, no contestes ninguna carta”

Las emociones intensas pueden impulsarnos a decir o hacer cosas que compliquen nuestra vida. Por ello, es importante que nunca prometamos nada a nadie cuando sentimos una gran alegría. Así mismo, debemos aprender a guardar silencio en aquellos casos en los que la ira hace presencia: las palabras pueden ser más destructivas que cualquier golpe. Y, luego, podemos arrepentirnos de todo cuanto hemos dicho u hecho. Debemos ser dueños de nuestras emociones.

8. “Cuando llegues a la última página, cierra el libro”

Para avanzar en la vida, se debe cerrar ciclos. Debemos aprender a disfrutar de todos los capítulos de nuestra vida en el presente, pero nunca debemos dejar capítulos sin acabar. Estas páginas funcionarán para anclarnos a algo que ya no es una realidad o que, de algún modo, no nos hace bien.

9. “Cuando el dinero habla, la verdad calla”

Por desgracia, el poder del dinero es mucho más que el de la verdad. Cuando hay dinero de por medio, las personas y las situaciones cambian. Sin embargo, esto no quiere decir que nada vaya a ser mejor. La honestidad y la humildad es algo que nunca debemos perder si queremos tener una buena consciencia.

10. “Si caminas solo irás más rápido; si caminas acompañado, llegarás más lejos”

El trabajo en equipo es fundamental para conseguir todo lo que nos hemos propuesto en la vida. Pero, esto no se aplica únicamente al entorno escolar o laboral: la familia es el mejor equipo, el más fuerte, que vamos a tener. Nuestros padres, abuelos y hermanos quieren vernos llegar lejos; quieren vernos conseguir hacer realidad nuestros sueños y podemos estar seguros de que van a estar allí cuando les necesitemos. Por este motivo, estas personas tan importantes van a ser piezas clave en nuestro éxito.

Proverbio chino sobre la vida

11. “Si te caes siete veces, levántate ocho”

El esfuerzo y la perseverancia son habilidades valiosas para avanzar por la vida. Nunca deberíamos perderlas de vista. Sin ellas, siempre vamos a estar en el mismo sitio, sin cumplir sueños, sin logros, sin metas. Por ello, aunque las cosas se pongan feas, debemos confiar en nosotros. Nos caemos, nos levantamos: tantas veces cómo sea necesario.

12. “Ámame cuando menos lo merezca, porque será cuando más lo necesite”

Querer a alguien en su mejor momento es fácil: todo fluye, no hay problemas y las relaciones son bastante fáciles. Pero, en este momento, es cuando menos se nos necesita: solamente debemos disfrutar y acompañar a familia y amigos en su éxito. Sin embargo, cuando las cosas se ponen feas, cuando nos sentimos devastados, tristes o enfadados, es cuando más necesitamos de los que nos rodean. En estos malos momentos, aunque sea más difícil lidiar con nosotros, es cuando más necesitamos el apoyo y el cariño de los nuestros. Y lo mismo sucede con los que nos rodean: estar tanto en las buenas como en las malas es el secreto del gran amor.

13. “No tengas miedo de los cambios lentos; solo ten miedo de permanecer inmóvil”

Los sueños no se consiguen en un día. Ni en dos. Para llegar lejos, solamente debemos compararnos con nosotros mismos y tratar de ser mejor de lo que éramos ayer. No importa lo rápido que vayamos por el camino de la vida, la cuestión es seguir avanzando día a día.

14. “Los maestros pueden abrir puertas, pero solo tú puedes entrar”

Por mucho que los demás nos quieran enseñar cosas, solo nosotros podemos decidir si queremos aprender. Son muchas las enseñanzas y las lecciones que recibimos a diario, pero solamente nosotros podemos decir cuáles aprendemos. Negarse a aprender, a evolucionar, no nos hará ningún bien. Y, siempre, siempre, hay algo que aprender.

15. “La gente se arregla todos los días el cabello. ¿Por qué no el corazón?”

La gente está más preocupada por su aspecto físico que por su interior: debería ser al revés. No solamente por la manera en la que tratamos a los demás, sino por la manera en la que nos tratamos a nosotros mismos. Si le dedicamos tiempo a cuidar nuestro cuerpo, ¿por qué no cuidamos nuestro corazón o nuestra mente? Aprender a querernos, a gestionar nuestras emociones, es uno de los mayores actos de amor que podemos tener con nosotros mismos.

Los proverbios chinos están llenos de metáforas con las que podemos enseñar muchísimo a nuestros hijos. Nos dan la oportunidad de pasar tiempo con ellos, de tener conversaciones profundas en las que podamos reflexionar sobre la vida y la naturaleza de las personas. Por ello, es un recurso educativo que debemos explorar, tanto para los más pequeños de la familia como para nosotros.

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