Decir ‘no’ a los niños y ser coherente con ello

En la actualidad aún son muchos los padres que se confunden con el hecho de que poner normas o límites puede ser lo mismo que prohibir o reprimir a los niños, pero esto no tiene que ser así. Poner normas no significa que los niños dejen de ser libres o que no deban tomar sus propias decisiones. La disciplina se puede ejercer con amor, con límites adecuados y sobre todo con normas razonables y coherentes que hagan a los niños desarrollarse en seguridad y armonía. 

Los adultos, deben aprender a decir ‘no’ a los niños. En ocasiones, sobre todo para los padres más permisivos, puede resultar incluso doloroso, pero es necesario darse cuenta de que no es tan complicado y que incluso, es necesario. Pero, ¿cuándo es adecuado decir que ‘no’ a los niños?

Aprende a decir ‘no’ en el momento adecuado

Si te pasas diciendo ‘no’ y dices que no demasiadas veces, entonces llegará un momento en que tu hijo dejará de escuchar esa indicación porque ya no tiene validez ni coherencia. Los niños son muy inteligentes y rápidamente se dan cuenta de cuando el ‘no’ se utiliza de forma injustificada. Pero, ¿cuándo hay que empezar a decir que no? Los niños durante su primer año de vida deben sentir cómo sus padres satisfacen sus necesidades rápidamente porque de esa manera se sentirán seguros y confiarán en sus progenitores, por tanto la palabra ‘no’ durante el primer año de vida, simplemente no debe existir.

En cambio, a medida que un bebé crece y empieza a mostrar su identidad, la cosa debe comenzar a cambiar. Es a partir de los 12 meses cuando debe aparecer el ‘no’, aunque no sea demasiado firme pero sí eficaz. A partir de los 16 meses el pequeño empieza a querer más independencia pero no es autónomo por lo que las rabietas son fáciles cuando siente que sus demandas no son satisfechas, pero es en este momento cuando el ‘no’ debe aparecer con mayor intensidad en momentos puntuales.

La importancia de establecer límites claros

Los niños intentan averiguar el alcance de sus acciones y saber cuándo deben aceptar las normas y cuándo no es necesario, ¿cuándo es aceptable y cuándo no lo es? ¿’No’ a veces significa ‘Sí’? Los niños pueden sentirse confundidos si no hay un límite claro. Pero hay algunos momentos clave en los que los niños deben de escuchar la palabra ‘no’ sin excepción:

• En el retraso de la gratificación
• Para no satisfacer todos sus caprichos
• Cuando el niño puede estar en peligro
• Cuando muestra actitudes violentas hacia uno mismo o hacia los demás
• Para que aprenda a tolerar la frustración y la espera

Puede ser agotador pero es imprescindible

En el mundo de hoy hay muchos padres que trabajan fuera de sus hogares y también dentro, pero además también deben cumplir con su trabajo como padres -algo por lo que no hay remuneración de ningún tipo-. Los padres en la actualidad tienen poco tiempo para sus hijos y nadie quiere que el tiempo que pasan con sus hijos solo sea para discutir o establecer normas… Para educar a los hijos, no queda más remedio que establecer límites. Poner normas no significa crear conflictos, ni mucho menos.

No es necesario tampoco que le des a tus hijos todo lo que quiere solo por no verles enfadados. El tiempo junto con tus hijos puede ser muy agradable si eres coherente con lo que haces y con lo que dices. Las normas y el ‘no’ son necesarias, pero debes ser consciente de que ellos también deben sentir la libertad y el control de sus vidas. Las alternativas y las opciones son las mejores estrategias.

Ojo con no usar esta palabra demasiado

Es necesario no abusar del ‘no’ porque si lo usas con frecuencia no tendrá ningún efecto sobre tus hijos y de repente, se quedarán sordos ante esa palabra. Cuando le digas que no a algo es crucial que siempre le expliques por qué no debe comportarse de una forma determinada y además, dale opciones para que sepa cuál es la mejor forma. Así evitarás frustraciones y podrá escoger la forma de comportarse.