Familia

Besos diferentes, pero muy divertidos para decirles a los niños cuánto los quieres

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Besos
Jennifer Delgado

Jennifer DelgadoEducadora, psicóloga y psicopedagoga

Los besos son una de las muestras más claras de amor hacia los niños. Les besamos para darles los buenos días o las buenas noches, para recibirlos cuando llegan a casa del colegio o para despedirlos al salir. También les damos besos cuando queremos mimarles, cuando han hecho algo bonito que nos resulta muy tierno o cuando queremos hacer las paces después de una pelea. Se trata de un gesto sencillo, pero con un gran valor que nos permite transmitirles todo nuestro cariño a los más pequeños de casa. Sin embargo, también pueden convertirse en un recurso divertido para crear tradiciones familiares que nos ayuden a fortalecer la relación con los niños.

¿Por qué son importantes los besos para los niños?

Los besos son esenciales para el desarrollo emocional de los niños. No solo les aportan seguridad y refuerzan su autoestima, sino que les ayudan a calmarse cuando están inquietos. Además, ¿sabías que pueden tener efecto calmante frente al dolor? Los besos pueden aliviar pequeñas dolencias como un golpe o un ligero cólico ya que son capaces de generar serotonina y dopamina, dos neurotransmisores que mejoran la sensación de bienestar.

También son un remedio ideal para reducir la ansiedad y el estrés en los más pequeños de casa. Eso debido a que disminuyen los niveles de cortisol mientras aumentan las endorfinas, la hormona de la felicidad. Y, a la vez, pueden mejoran la sensación de bienestar y la felicidad ya que al recibir un beso el cuerpo libera oxitocina, conocida como la hormona del amor. Esto además de mejorar el estado de ánimo, haciendo que los niños estén más alegres y motivados.  Por supuesto, los besos también ayudan a conectar con los pequeños y mejoran la comunicación familiar, reforzando el vínculo madre/padre-hijo.

Sin embargo, lo que pocos saben es que los besos también pueden ser un buen aliado para fortalecer el sistema inmune de los niños. Así lo reveló un estudio realizado en la Universidad Carnegie Mellon en el que se encontró que los besos y los abrazos pueden proteger frente a los virus comunes ya que actúan reforzando las defensas naturales en los niños. Esto además de estimular el desarrollo cerebral infantil ya que se conoce que los pequeños que crecen con un apego seguro, rodeados de besos y abrazos, tienen un mayor volumen de materia gris y blanca.

5 besos originales para no cansarte de mimar a tus hijos

No hay nada más reconfortante que dar un beso en la mejilla a los niños. ¿Quién puede cansarse de dar o recibir este simple remedio para el alma? Sin embargo, más allá del tradicional beso en la mejilla, existen otros besos que también pueden ser muy divertidos y ayudaros a crear una costumbre más personalizada en casa. He aquí algunas ideas de besos originales y divertidos.

1. Beso esquimal

Beso esquimal

Los besos esquimales pueden convertirse en un recurso muy tierno para mostrarle vuestro cariño a los niños en casa. Similares a los besos en la famosa serie de dibujos animados David el Gnomo, se trata de un tipo de beso en el que se frotan la nariz de uno contra la del otro. El origen de este tipo de beso procede, efectivamente, de los esquimales, quienes al vivir en una zona muy gélida corren el riesgo de quedarse pegados a la otra persona si la saliva de los labios entra en contacto con la mejilla del otro y se congela. De ahí que recurran a frotar sus narices para demostrar su cariño.

2. Beso en la frente

Beso en la frente

Otro tipo de beso muy tierno que puedes darles a los más pequeños de casa son los besos en la frente o en la cabeza. Considerados un signo de admiración y respeto, también son una demostración de ternura y protección. Se trata de un beso muy sencillo, pero que contiene sentimientos muy profundos. Eso sí, si quieres que el beso sea recíproco con los niños, deberás agacharte hasta su altura para que también ellos puedan darte un beso en la frente.

3. Beso de ángel

Beso de ángel

El beso del ángel está considerado uno de los besos más tiernos que existen. Básicamente, consiste en besar con suavidad los párpados de la otra persona. Si bien, suele utilizarse sobre todo para despertar a los niños o a la hora de llevarlos a la cama, también puede convertirse en una muestra de cariño espontánea en otro momento del día. Sin duda, a los más pequeños de casa les encantará y estarán dispuestos a cerrar sus ojitos en cualquier circunstancia para recibir un beso de ángel.

4. Beso de mariposa

Beso de mariposa

¿Quién dijo que solo se puede besar con los labios? Los besos de mariposa son otra muestra de cariño muy tierna que despertará la sensibilidad de los más pequeños de casa. El beso consiste en acercar el rostro a la mejilla del otro hasta que el ojo roce la piel. En ese momento, se parpadea suavemente para mover las pestañas y acariciar la mejilla. La sensación será similar a la del aleteo de una mariposa. Es ideal sobre todo para esos momentos de relax y mimos, aunque también puede ser un buen recurso para despertar a los niños por la mañana.

5. Beso sándwich

Beso sándwich

Otro tipo de beso muy divertido para darles a los niños consiste en el beso sándwich. Básicamente, se trata de un beso familiar ya que la idea es que la madre se acerque por un lado y el padre por el otro para darles un beso al unísono en ambas mejillas que quedarán como el relleno de un sándwich. Si bien puede ser un recurso útil para los momentos de ocio o juegos juntos, también es una buena manera de canalizar un momento de tensión de una forma sencilla y divertida.

Otra idea original, sobre todo para los momentos en los que tenéis que separaros es el beso al aire que no es más que dar un beso en la propia palma de la mano para luego ponerla en la dirección en la que se encuentran los niños y soplar como si estuvierais lanzando el beso. Si los niños también lo hacen, podéis hacer como si atraparais el beso en el aire y lo guardarais en el bolsillo o cerca del corazón para llevarlo siempre con vosotros.

Cohen, Sh. Et. Al. (2015) Does hugging provide stress-buffering social support? A study of susceptibility to upper respiratory infection and illness. Psychology Science; 26(2):135-147.

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