Un niño que lee será un adulto que piensa

Un niño que lee se convertirá en un adulto libre y es que leer es crecer internamente. Leer es parte de la vida y nos ayuda a entender muchos aspectos de ella, así mismo es una gran herramienta de comunicación humana que nos permite nutrirnos del conocimiento o imaginación de otros. Cuando se nutre la imaginación de los niños gracias a la lectura estaremos potenciando su capacidad intelectual, su creatividad y su desarrollo interno.

La lectura y los niños

Los niños cuando tienen tan sólo unos meses de edad, siendo aún bebés pueden ver fotos, escuchar una voz y señalar objetos en las páginas de un libro de cartón. Los padres tienen el deber de guiar a los hijos en este primer contacto con la lectura asociando palabras con fotos y objetos del mundo real, así es cómo los bebés aprenden la importancia del lenguaje.

Los niños aprenden la lengua antes de darse cuenta de la existencia de las palabras en los libros. La lectura de los libros infantiles estimula su imaginación y amplía la comprensión del mundo. Les ayuda a desarrollar el lenguaje y la capacidad de escucha, les prepara para comprender la palabra escrita, algo fundamental para el desarrollo académico. Además, cuando el ritmo y la melodía del lenguaje se convierte en una parte de la vida del niño, aprender a leer será algo tan natural como aprender a caminar y a hablar.

Incluso cuando los niños aprenden a leer por sí mismos, es necesarios seguir leyéndoles en voz alta. Los niños necesitan el ejemplo de sus padres para poder sentir que la lectura no es una obligación sino un momento de descanso, tranquilidad y por supuesto, de ocio.

La lectura es parte de la vida

Un niño que se da cuenta que la lectura es parte de la vida, podrá entender cómo la lectura es beneficioso para tu crecimiento interno. Verá en la lectura una amplia posibilidad de aprender cosas nuevas, de potenciar su imaginación, de descubrir bonitas historias… Leer nos ayuda a pensar, a tener un pensamiento crítico y por tanto, nos da libertad de pensamiento y de opinión.

Un niño que lee estará abriendo su mente a un mundo lleno de posibilidades, al conocimiento, al desarrollo del cerebro. La lectura para el cerebro es cómo el deporte para el cuerpo… necesita la lectura para mantenerse en forma y por eso, un niño que lee y que incluye la lectura en su vida como ocio y como algo que me motiva, será un adulto que piensa y que es capaz de tener sus propias inquietudes.

Adquirir el conocimiento a través de la lectura es una forma de diversión tanto para niños como para adultas que aman leer. Si como padres te preocupas por potenciar la lectura en los niños, les ayudará a ver a los libros como diversión y nunca como una tarea. Los niños que están expuestos a la lectura serán mucho más propenso a saber elegir mejor los videojuegos adaptados a su edad, a escoger programas de televisión con criterio y a saber decir que no cuando realmente quieran decirlo, siendo personas más empáticas y asertivas.

Como ves, la lectura es importante en la vida de las personas, no sólo en la vida de los niños, es por eso que resulta fundamental que desde que son bebés, los pequeños estén metidos en el mundo de la lectura, que vean a sus padres leer, amar la lectura, que tengan en su hogar la oportunidad de poder acceder a libros de sus gustos siempre que tengan interés en hacerlo… y así pasará de ser un niño que lee a un adulto que sigue leyendo y que es capaz de pensar por sí mismo.