5 pautas para comunicarse con un niño que sufre Asperger

El síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo que comienza temprano en la infancia y que se caracteriza por una alteración en el lenguaje y una marcada dificultad para gestionar las emociones. En la mayoría de los casos, los niños que padecen este trastorno presentan un retraso en el desarrollo motor y muestran conductas repetitivas, sobre todo cuando están nerviosos.

Sin embargo, uno de los principales problemas que acarrea este trastorno es que limita las posibilidades de los niños para comunicarse con los demás, lo que explica por qué es tan complicado relacionarse con ellos. A veces puede llegar a ser difícil instaurar una conversación, sobre todo cuando se trata de temas más complejos. No obstante, existen algunas pautas que pueden mejorar la comunicación con un niño que sufre Asperger.

Cinco recomendaciones para mejorar la comunicación

1. Habla sobre temas que les interesen

Los niños con Asperger tienen una esfera de intereses limitada, pero cuando les interesa un tema participan de forma activa de la conversación. Por eso, una buena estrategia para animarles a hablar consiste en hacerles una pregunta sobre un tema de su interés. Si no sabes cuáles son sus temas preferidos, puedes preguntarles directamente: ¿Qué te gusta hacer? o ¿Cuál es tu pasatiempo preferido?

2. Escoge un entorno apropiado

Elegir un entorno adecuado es fundamental para lograr que los niños que sufren Asperger se centren en la conversación. Lo que sucede es que muchos de estos pequeños se distraen con facilidad ya que tienen una hipersensibilidad auditiva que les hace percibir los sonidos de forma más intensidad, a la vez que son muy sensibles al exceso de luz y el movimiento continuo. Por eso, si quieres mantener una conversación, es recomendable que evites los ambientes muy ruidosos y luminosos, así como aquellos en los que se concentren muchas personas.

3. No les presiones demasiado

La mayoría de las veces, presionar a los niños con síndrome de Asperger para que te presten atención o respondan a tus preguntas resulta contraproducente. Insistirles demasiado hará que se sientan incómodos y, en vez de abrirse, se encierren más en sí mismos, negándose a entablar una conversación. En cambio, si no les presionas y dejas que piensen su respuesta con calma o simplemente aceptas su silencio como respuesta, harás que se sientan más cómodos y confiados, lo cual aumenta las probabilidades de que quieran entablar una conversación más tarde.

4. Elige el momento más oportuno

Los niños que padecen síndrome de Asperger suelen tener hábitos muy estructurados ya que esto les genera una gran sensación de seguridad y estabilidad. Por eso, cuando alguien interfiere en su organización cotidiana y cambia sus horarios sienten que pierden el control de la situación, lo cual los irrita. Teniendo esto en mente, es preferible que cuando vayas a entablar una conversación con estos pequeños busques el momento más oportuno, de manera que no interfieras en sus hábitos cotidianos. Si intentas hablarles mientras están ensimismados en una actividad que les apasiona, es probable que hagan oídos sordos o se alteren. De esta forma, les estarás transmitiendo que respetas su espacio y te ganarás más rápido su confianza.

5. Ten paciencia

Ganarse la confianza de los niños con síndrome de Asperger no es fácil, requiere mucha paciencia, tiempo y esfuerzo. Además, muchas veces se comportan de forma extraña, lo que hace que sea más difícil entenderles. Sin embargo, para forjar una relación sólida es importante que aprendas a detectar las señales que desvelan cuándo están cómodos y cuándo no, así podrás seguir intentando comunicarte o aplazar la conversación para otro momento. En estos casos, lo ideal es que sigas su propio ritmo para que no se sientan presionados ya que de lo contrario todo intento de acercamiento resultará contraproducente.