Educación

¿Qué hacer si tu hijo tiene pesadillas?

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hijo pesadillas
Jennifer Delgado

Jennifer DelgadoEducadora, psicóloga y psicopedagoga

Si tu hijo se despierta en medio de la noche asustado y le cuesta volver a dormirse, es probable que haya tenido una pesadilla, aunque no pueda explicarte con sus propias palabras qué ha soñado. Al contrario de los terrores nocturnos, en los que el niño se agita pero sigue soñando y cuando se calma vuelve a dormirse con tranquilidad pues no recuerda nada de lo sucedido, en las pesadillas es más difícil que el pequeño recupere el sueño porque sigue asustado ya que recuerda vívidamente las imágenes.

¿Cuándo aparecen las pesadillas?

Las pesadillas suelen aparecer en la etapa REM del sueño, que es cuando el cerebro está más activo pues se encuentra procesando las experiencias del día. Por eso, normalmente ocurren durante la segunda mitad de la noche.

Lo usual es que las primeras pesadillas aparezcan entre los 3 y 6 años. Sin embargo, no es hasta la etapa preescolar que los pequeños entienden que esas imágenes han sido solo un sueño y que lo que han soñado no es real, por lo que no puede hacerles daño.

¿Qué causa las pesadillas?

Es difícil saber con precisión qué causa las pesadillas infantiles. De hecho, muchas ocurren sin más. No obstante, en algunos casos puede tratarse de alguna experiencia que el niño vivió a lo largo del día o de un suceso puntual antes de acostarse que le impresionó o enfadó, como una escena violenta en la televisión o un pasaje de un libro.

El estrés también puede causar pesadillas. Por ejemplo, si el pequeño está siendo víctima de una situación de acoso escolar, está sacando malas calificaciones, se encuentra enfermo, debe asistir a una nueva escuela o existen tensiones familiares en el hogar, puede expresar esas preocupaciones a través del sueño.

Los temas de las pesadillas variarán según la edad del niño y sus principales miedos. Por ejemplo, los niños pequeños suelen soñar con monstruos que intentan comérselos, los persiguen o los castigan. A medida que crecen comienzan a soñar con situaciones de la vida real, como ser ridiculizados por sus compañeros de colegio o ser reprendidos duramente por la profesora.

niño pesadilla

¿Cómo ayudar al niño después de una pesadilla?

1. Tranquilízale

Acude inmediatamente a su habitación y hazle saber que estás a su lado. Cuando el niño está asustado, abrazarle es importante porque se sentirá protegido. El simple hecho de tener a su padre o a su madre a su lado contribuirá a que se calme.

2. Explícale qué ha ocurrido

Explícale que ha tenido una pesadilla. Recuerda que el niño estará asustado y es probable que le cueste diferenciar el sueño de la realidad, así que debes explicarle que, sea lo que sea que ha ocurrido en el sueño, no puede hacerle ningún daño en el mundo real.

3. Sé su héroe

Si el niño es pequeño, por muchas razones lógicas que le des, es probable que siga teniendo miedo. En esos casos, lo mejor es echar a volar la fantasía y convertirte en un superhéroe. Revisa cada rincón con él, para que se cerciore de que no hay ningún monstruo escondido en la habitación, utiliza un spray especial para matar dragones o coloca a su alrededor un mosquitero mágico que le haga invisible.

4. Valida sus emociones

Muchos padres le restan importancia a la pesadilla, diciéndole al pequeño que no tiene sentido tener miedo por un sueño. Sin embargo, en ese momento el niño lo que necesita es que validen sus sentimientos. Dile que entiendes que esté asustado y que no pasa nada por tener miedo. Explícale que a veces tú también tienes pesadillas que te intranquilizan, pero que una vez que os despertáis no hay nada que temer.

5. Ayúdale a dormir

Consuélale y quédate un rato a su lado hasta que se tranquilice por completo. Puedes darle su peluche preferido, para que se sienta protegido, o colocarle una almohada a un costado, un truco que les suele hacer sentir seguros. También puedes dejar encendida una luz tenue e indirecta en la habitación o en el pasillo.

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