Si no quieres que toquen a tu bebé, dilo
Referencias científicas
Este artículo tiene referencias científicas citadas más abajo
No es un momento fácil, pero es necesario hacerlo. Aprender a decir que no es de las mejores cosas que puedes hacer en tu vida, y esto, es necesario desde que te quedas embarazada y seguirás haciéndolo cuando tu bebé haya nacido y luego, durante el resto de tu vida. Decir que NO con asertividad es necesario, porque si no lo haces, puedes caer enferma/o, literalmente. Si no aprendes a decir que no, podrías perder el control de tu vida y de lo que ocurre a tu alrededor.
Es necesario encontrar el equilibrio entre dos polos opuestos que son igual de negativos: decir siempre que sí o decir siempre que no. Defiende lo que sientes sin necesidad de lastimar o perjudicar a nadie. Si no quieres que toquen a tu bebé, dilo.
Todo, ¿idílico?
Quizá tú y tu pareja pasasteis un embarazo perfecto, el parto fue maravilloso y tu bebé nació sano y en perfectas condiciones. Hasta ahí todo es maravilloso (realmente). Pero de repente, una vez que empiezan a pasar los días, tanto tú como tu pareja os empezáis a agobiar, comienzan las discusiones, estáis nerviosos, el bebé llora más de la cuenta porque os nota nerviosos, ¿qué ocurre? Es fácil de comprender: las visitas.
Las visitas son normales hasta cierto punto, puesto que los familiares y amigos deben comenzar a comprender que los padres y el bebé necesitan intimidad y complicidad los primeros días (y semanas) después del parto. Necesitan conocerse, necesitan acercarse, necesitan encontrar la tranquilidad y el equilibrio de la nueva vida que empiezan juntos. Pero hay quienes no entienden esto y cuando las visitas se marchan los lloros y las lágrimas quedan en casa.
Lloros y lágrimas por la impotencia, por no saber decir que no, que no tenéis ganas de visitas, que no quieres que toquen a tu bebé. Que no se fuma en casa, que ese olor a tabaco es horrible, que si están resfriados que no os visiten porque puede ser fatal para tu bebé… Y se actúa de forma diferente a lo que se piensa y entonces, comienzan todos los males.
Di que NO, di basta… Y no te sientas mal por ello
Ahora sois una familia, ahora eres la madre leona. Esa madre que haría cualquier cosa por sus hijos, por sus cachorros. Sacarás las garras siempre que sea necesario y debes comenzar desde ya. Olvida lo políticamente correcto, olvida ‘el quedar bien’ si realmente no lo sientes. Pon normas, establece límites. Si no quieres que te visiten sin avisar, dilo. Si no quieres que toquen a tu bebé si han fumado, dilo. Si no quieres que una persona que está resfriada o tiene cualquier tipo de afección leve (pero que puede ser mortal para tu bebé) os visite, dilo. Quienes os quieren lo respetarán.
Quienes os quieren avisarán antes de ir a veros y si van, no esperarán café y pastas. Os dirán si necesitáis algo para hacer en casa, ¿fregar los platos? ¿traerte algo del supermercado? Estas visitas son las reales, las otras, solo es curiosidad por conocer al bebé.
No tienes que soportar como tu bebé va de brazo en brazo, incluso en brazos de esas personas que ni te felicitan en tu cumpleaños. No tienes que aguantar eso, tu bebé no tiene que soportar eso.
No hay mamífero en la naturaleza que quiera que le arrebaten a sus cachorros, la mamás siempre protegen a sus crías incluso con su vida si es necesario. Las mamás humanas también y por eso te pones nerviosa cuando otros tocan a tu bebé, y si no quieres que lo hagan es natural, simplemente, dilo.
Normas, límites y horarios
Si no te sientes con fuerzas, habla con tu pareja y que sea él quien regule y organice las visitas. Acordad unos criterios claros, pero no aceptéis lo que no queréis que ocurra. Esas situaciones se pueden evitar y no debe ser desagradable. No tenéis que ser descorteses ni mucho menos, pero debéis mantener vuestra privacidad y complicidad familiar a salvo. Vuestro bebé os necesita SOLO a vosotros.
Quien quiere ayudar de verdad que sepa que lo ideal es hacer comidas, lavar la ropa, limpiar, cuidar a los demás hijos, etc. Es vuestro espacio, es vuestro momento… y solo vosotros debéis saber cómo queréis vivirlo. Las primeras semanas son cruciales tanto para el bebé como para los padres. Tu bebé os necesita tranquilos y no nerviosos. Tu bebé no entiende lo que ocurre a su alrededor pero sí entiende lo que percibe y lo que siente. Tus emociones se convierten en suyas.
Si estás nerviosa tu bebé llora, también descarga esa tensión acumulada. Después lloras tú. Si no quieres visitas, dilo. Si no quieres que toquen a tu bebé, dilo también. Jamás te sientas culpable por ello porque tú eres una leona y tu bebé es tu cachorro.
Comentarios
Ver información legal y reglas de comentarios
Información legal
Etapa Infantil te informa que los datos de carácter personal que nos proporciones rellenando el presente formulario serán tratados por DICE LA CANCION, SL (Etapa Infantil) como responsable de esta web.
La finalidad de la recogida y tratamiento de los datos personales que te solicitamos es para gestionar los comentarios que realizas en este blog.
Legitimación: Consentimiento del interesado. Como usuario e interesado te informo que los datos que me facilitas estarán ubicados en los servidores de Linode (proveedor de hosting de Etapa Infantil) fuera de la UE en Otros. Linode está ubicado en UE, un país cuyos nivel de protección son adecuados según Comisión de la UE. Ver política de privacidad de Linode. El hecho de que no introduzcas los datos de carácter personal que aparecen en el formulario como obligatorios podrá tener como consecuencia que no atender pueda tu solicitud.
Podrás ejercer tus derechos de acceso, rectificación, limitación y suprimir los datos en info@etapainfantil.com así como el derecho a presentar una reclamación ante una autoridad de control.
Puedes consultar la información adicional y detallada sobre Protección de Datos en mi página web: etapainfantil.com, así como consultar mi política de privacidad.
REGLAS PARA COMENTAR
Etapa Infantil es un blog plural abierto a los padres, educadores y todas las personas interesadas en la crianza y la educación de los niños. Nos gusta dialogar porque pensamos que el debate enriquece. No obstante, también es necesario mantener cierto orden en la web. Por eso, antes de escribir un comentario, te recomendamos que leas las siguientes normas:
- No escribas comentarios ofensivos, difamadores, vulgares o que puedan considerarse como un ataque personal. Si vas a expresar una opinión diferente, que sea de forma respetuosa.
- No envíes SPAM ni hagas comentarios con fines publicitarios. Si vas a incluir un enlace, cerciórate de que realmente aporta valor a la lectura.
- Asegúrate de que el comentario se corresponde con el tema del artículo. Si no es así, busca el artículo correspondiente. En el blog hemos tratado muchísimas temáticas.
- Sé breve, no escribas comentarios muy largos. Ten en cuenta que nuestro tiempo es limitado y nos resulta más fácil responder si eres conciso.
- Utiliza adecuadamente el castellano, recuerda que todos los lectores deben entender lo que escribes.
- No escribas en mayúsculas, es como si estuvieras gritando y resulta incómodo de leer.
¡Gracias por compartir tus opiniones y experiencias!