Familia

¿Qué se puede hacer cuando ponen a un hijo en nuestra contra?

[mashshare icons=»1″]

¿Qué hacer cuando te ponen a tu hijo en contra?
Adriana Mendez

Adriana MendezEscritora y Psicóloga

Uno de los retos más agotadores y complejos que se puede vivir en el núcleo familiar es un divorcio, pues no solamente implica la separación de dos personas que pensaron estarían juntos por siempre, sino también, la desunión de la rutina en casa con los niños. Es por eso que se recomienda tener una guía psicológica que ayude a que esta transición no sea tan pesada para los más pequeños. Así los padres pueden llegar a acuerdos beneficiosos para la crianza de sus hijos.

Sin embargo, este no siempre es el caso y es que, por rencor o dolor, hay padres que hacen que sus hijos rechacen a su otro progenitor, generando que el vínculo entre los dos se rompa y dejando la pregunta, ‘¿qué se puede hacer cuando ponen a un hijo en nuestra contra?’.

Síndrome de Alienación Parental

Cuando uno de los padres hace que su hijo vea al otro progenitor como un enemigo, se conoce como ‘Síndrome de Alienación Parental’. Este término fue planteado por Richard A. Gardner en 1985 y se describe como una alteración en el vínculo parental, debido a que los hijos tienen actitudes punitivas con su padre o madre, pueden criticarlos de forma contínua, ignorarlos, desobedecerlos, retarlos o rechazarlos.

Esto se genera por separaciones conflictivas, donde uno de los padres incentiva a sus hijos para descalificar al otro padre, tanto de manera inconsciente como consciente. Por ejemplo, hablando mal de sus acciones, creando una sensación de abandono hacia ellos o distorsionando el interés que el padre muestra a sus hijos.

En estos casos, entra en juego una intervención psicojurídica, donde se demuestre que el vínculo padre-hijo se ha roto debido a la manipulación del otro padre y un acompañamiento psicológico para regenerar dicha relación.

¿Qué hacer cuando ponen a tu hijo en contra?

Las situaciones de Síndrome de Alienación Parental nunca son fáciles de resolver, por eso, el padre que ha sido rechazado debe trabajar el doble para demostrar a sus hijos la otra verdad, sin que se desarrolle una nueva guerra.

1. Buscar ayuda profesional

Estos casos son sumamente delicados, por lo que es necesario la orientación jurídica y psicológica, para llegar a acuerdos no conflictivos entre los padres y buscar generar una comunicación más amable. También se debe ofrecer una guía terapéutica saludable para el bienestar emocional de los niños.

2. Mostrar una actitud asertiva

En estos casos lo más acertado es mantener la calma y mostrarse abiertos ante los hijos, a pesar de sus malas actitudes o palabras hirientes, recuerda que solo repiten lo que escuchan del otro padre.

Demostrar tu cuidado, atención y amor a tus pequeños hará que estos generen sus propias opiniones, bajen la guardia y dejen de estar a la defensiva.

3. Demostrar compasión

Un error muy común es devolver el golpe con insultos y malos tratos hacia el progenitor que provoca la situación, pero esto solo creará una cadena de resentimiento en la que los niños se ven atrapados, desconfiando de ambos padres.

Demuéstrales que es posible romper el ciclo, sin hablar mal del otro padre y buscando mediar cualquier conflicto. Dejando en alto los valores de respeto, compasión y empatía.

4. Actuar desde la prevención

Estos casos de alienación parental no ocurren de la noche a la mañana y es por eso mismo es posible prevenirlo. Creando un ambiente armonioso dentro de casa para los niños y llegando a un acuerdo amable como padres donde se ponga como prioridad, la seguridad de los hijos.

5. Nunca generes distancia

Aunque parezca imposible generar de nuevo un vínculo amoroso con tus hijos, con tiempo, espacio, paciencia y dedicación las cosas irán mejorando. Lo importante en este caso es que no dejes de demostrar tu interés y apoyo, hazle saber que estarás allí cuando tu hijo lo necesite.

No estamos hablando de ‘comprar’ su amor, dándole cada regalo que veas o cumpliendo todos sus caprichos, porque harás que vea la relación como un beneficio de intereses. Se trata de recordarle tu presencia y que puede confiar en tí.

Poner a los hijos en contra de los padres

Consecuencias de poner a los hijos en contra de los padres

¿Qué ocurre cuando uno de los padres aliena la relación de su hijo con el otro? Generan consecuencias que padecerán los hijos tanto en su niñez como en su adultez, tal y como se plantea en el estudio de El síndrome de alienación parental propuesto por Howard Walter.

1. Vínculos desadaptativos

Cuando los hijos ven a un padre o madre como enemigo, no se interesan en crear una relación adecuada con este. Negándose a asistir a las visitas que tenga pautadas con este padre o mostrándose rebelde en cada ocasión.

2. Lealtades conflictivas

Al crearse una distancia forzada, los niños desarrollarán una lealtad más fuerte con el padre que tenga la custodia mientras que presentará una actitud más defensiva frente al otro padre, porque tienen una visión de quien destruyó a la familia.

3. Maltrato infantil

Según el estudio de El síndrome de alienación parental: una forma de maltrato infantil, llevado a cabo por C. Segura, MJ. Gil y MA. Sepúlveda. El Síndrome de Alienación Parental se considera como una forma de maltrato infantil, debido a que priva el derecho de los niños a tener una relación saludable y adecuada con uno de sus padres y afecta su estado emocional.

4. Desarrollo de conductas conflictivas

Cuando los niños no sienten que su hogar sea un lugar seguro, intentan reconfortarse con algo más, sea bueno o malo. En muchos casos los niños desarrollan conductas conflictivas, como bullying escolar, agresión a otras personas, bajo rendimiento académico, retraimiento, aislamiento o manipulación para conseguir lo que quieren.

5. Inseguridad destructiva

El sentirse ‘abandonados’ por uno de sus padres genera una serie de inseguridades que van escalando a medida que el niño crece. Tanto en el aspecto social como personal, los niños se vuelven tímidos y reacios a crear nuevos vínculos por miedo a ser dejados.

Hay que tener en cuenta algo, en un divorcio es la pareja quienes se separan porque su relación no es funcional. Pero esto no debe mezclarse con el rol como padres, ya que la relación con sus hijos será para siempre y ninguno de los padres debe interponerse en el vínculo del otro.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *