Educación

La marihuana y el cerebro de los adolescentes

El cerebro del adolescente está en desarrollo y la marihuana puede provocarle daños permanentes

[mashshare icons=»1″]

Marihuana adolescentes
Mª José Roldán

Mª José RoldánMaestra y Psicopedagoga

Hay dos cosas que son ciertas acerca de la marihuana. La primera es que no discrimina a nadie, se adhiere a todas las vidas diferentes de las personas y la segunda es que cualquiera que conceda una entrada a su vida a la marihuana sufrirá daños si lo mantiene. Se han demostrado daños frecuentes del consumo de la marihuana en el cerebro de los adolescentes y también de los adultos jóvenes.

A lo largo de la adolescencia y hasta mediados de la década de los veinte, el cerebro de las personas continúa desarrollándose de forma crítica para la función del pensamiento y la función ejecutiva: la memoria, el razonamiento o la resolución de problemas. La materia blanca del cerebro es importante para la eficiencia neuronal, aumenta la calidad y el volumen a los 30 años de las personas.

La adolescencia es un período de desarrollo

La adolescencia es un período de desarrollo muy importante para el cerebro y la exposición a las drogas durante esta etapa tendrá un gran impacto en el cerebro durante la vida adulta. Los psicólogos han observado durante años los efectos de un deterioro cognitivo, una mala atención, mala memoria y una disminución de inteligencia.

El consumo habitual de marihuana -cannabis- como por ejemplo una vez a la semana, no es seguro y puede hacer que se convierta en una adicción, por lo que el daño neurocognitivo es inminente, sobre todo en la adolescencia y la juventud.

Un estudio que deja claro el efecto de la marihuana en los adolescentes

En un estudio longitudinal de 2012 de 1037 participantes que fueron seguidos desde el nacimiento hasta los 38 años, se encontró que los que consumieron marihuana regularmente perdieron en promedio de 5,8 puntos de CI al llegar a la vida adulta. Esto se comparó con aquellos que nunca consumían marihuana -o no regularmente- cuyo CI ligeramente había aumentado 0,8 puntos de CI de la infancia a la edad adulta.

Marihuana cerebro adolescente

Los escáneres cerebrales de los usuarios habituales de marihuana muestran cambios estructurales significativos, incluyendo anormalidades en la materia gris del cerebro. Estas anomalías se asocian con una reducción de la función cognitiva, aumento de los síntomas del estado de ánimo y una mala memoria. Estos cambios se vieron claros en adolescentes de tan sólo 16 años y no estaban relacionados con enfermedades médicas graves ni a ningún factor que pudiera desencadenarlo.

Problemas emocionales derivados de la marihuana

Hay pruebas en investigaciones que relacionan el consumo frecuente de marihuana con depresión, ansiedad e incluso psicosis. De acuerdo con el Dr. Alan Budney del Departamento de Psiquiatría de la Facultad de Medicina de Geisel en Dartmouth, ‘Estudios recientes sugieren que esta relación entre la marihuana y la enfermedad mental puede ser moderada por la frecuencia con la que se consume marihuana y la potencia que tenga la sustancia’.

¿Tolerancia hacia la marihuana medicinal?

En un estudio de 2013 de más de 17.482 adolescentes, se encontró que el consumo de marihuana es mayor entre los adolescentes de los países que tenían una actitud más tolerante hacia la marihuana medicinal. Una mayor tolerancia de la marihuana con fines medicinales parece promover una mayor tolerancia a la droga en general, al menos para los adolescentes, posiblemente debido a una percepción disminuida de los riesgos asociados con la droga.

Los riesgos de la marihuana en el cerebro en desarrollo han sido ampliamente documentados. El debate en torno a la legalización de la marihuana con fines medicinales está en auge en la actualidad. En caso de que la marihuana medicinal sea aprobada en todos los países, sería necesario que todas las personas que tuvieran que fumar marihuana medicinal también fuesen advertidos sobre los efectos que puede tener en su cerebro y sus vidas. Así, las personas podrían tener una decisión más objetiva sobre su consumo.

Al mismo tiempo, es necesario informar a los adolescentes y tener una comunicación abierta sobre el consumo de drogas y sus efectos.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *