Tautograma, un juego divertido y con múltiples beneficios para los niños

El tautograma es un juego cuyos orígenes se remontan a la Edad Media. Se cree que en esa época ya algunos autores se dedicaban a dar forma a estos poemas o versos formados por palabras que empezaban por la misma letra. Sin embargo, su uso con fines lúdicos y/o educativos es un poco más moderno. En cualquier caso, no deja de ser un juego muy entretenido y estimulante para los niños, con el que pueden aprender nuevas palabras y dar rienda suelta a su creatividad mientras pasan un rato diferente y de calidad con sus amigos y/o familiares.

¿Qué es el tautograma? ¿Cómo se juega?

El tautograma no es más que un texto formado por palabras que empiezan por la misma letra como, por ejemplo, “Tres tristes tigres triscan trigo tras tres trigales”. Básicamente, se trata de un reto de expresión verbal que exige una gran destreza y dominio del idioma. De ahí que sea apto para los niños más mayorcitos que ya tengan un dominio amplio del lenguaje y puedan conjugar diferentes palabras que empiecen por la misma letra para darles un sentido lógico y coherente.

Pero ¿cómo jugar a los tautogramas? Para jugar, cada participante debe tener una hoja de papel y un lápiz. El juego comienza cuando uno de los participantes, que puede prestarse por voluntad propia o ser elegido en sorteo, elige una letra. Entonces, el resto de los jugadores tienen que escribir en el papel una frase en la que utilicen palabras que comiencen por dicha letra. Cuando todos terminen, se leen todos los tautogramas y gana el jugador que haya conseguido hacer la frase más larga, usando la mayor cantidad de palabras que empiecen por esa letra.

Para continuar el juego, se elige otro jugador que será el encargado de escoger una nueva letra para comenzar otra ronda y así, sucesivamente hasta llegar al número de rondas previamente pactado o hasta que el agotamiento venza a los jugadores. Al final del juego, gana el participante que tenga más victorias por ronda.

Los beneficios para los niños de jugar al tautograma

Jugar con palabras puede ser muy divertido, pero también reporta numerosas ventajas para el desarrollo cognitivo de los más pequeños de casa. Tanto si los niños tienen un dominio amplio del lenguaje como si están empezando a aprender a expresarse, jugar al tautograma puede ser particularmente beneficioso ya que:

1. Aumenta su vocabulario

Los tautogramas son un recurso excelente para que los niños amplíen su vocabulario y se familiaricen con nuevas palabras. Una manera sencilla y divertida de que conozcan nuevas acepciones y profundicen en el significado de conceptos que hasta ese momento no conocían.

2. Entrena su escritura

Jugar a los tautogramas es una buena manera de animar a los niños a entrenar su escritura de una manera entretenida. Es una excusa perfecta para que tengan que poner en práctica las normas de ortografía y redacción, así como para entrenar y mejorar el trazo de las letras.

3. Desarrolla su agilidad mental

Tener que pensar en una frase coherente formada por palabras que comienzan por una misma letra requiere una gran agilidad mental. Se trata de un juego ideal para fomentar la destreza cognitiva de los niños y animarlos a pensar con mayor rapidez.

4. Estimula su creatividad

Jugar a los tautogramas contribuye a estimular la creatividad infantil y dar rienda suelta a su imaginación. Al tener total libertad para crear una frase con palabras que empiecen con una misma letra, los niños deberán echar mano a su inventiva para dar forma a un texto que cumpla con estas normas pero que, a su vez, pueda comprenderse.

5. Fomenta su aprendizaje

Sin duda, los tautogramas son una excelente manera de motivar a los niños a tener un rol más activo en su propio aprendizaje. Una manera sencilla de despertar su interés por aprender nuevas palabras y conceptos, así como comprender el significado de los términos que ya conoce.

Ejemplos de tautogramas sencillos para los niños

Jugar a los tautogramas puede ser complicado las primeras veces, sobre todo si los niños no tienen experiencia en este tipo de actividades. Por eso, primero es necesario explicarles en qué consiste el juego y, nada mejor para que lo entiendan bien que proponerles algunos ejemplos visuales. He aquí algunos ejemplos de tautogramas sencillos, en los que se permite el uso de pronombres y proposiciones que empiezan con otras letras para facilitar el trabajo, que pueden servir de ejemplo para los más pequeños de casa.

Con la letra A
– Ana ayer acarició a aquel animal, aprendiendo algo asombroso

Con la letra B
– Bruno babea baba blanca

Con la letra C
– Cuando cuentes cuentos cuenta cuántos cuentos cuentas

Con la letra D
– Doscientas docenas de desgarbados dromedarios del desierto de Dakar danzaron dócilmente durante doce días, durmiendo después doloridos durante dos días

Con la letra E
– El enanito estaba en el estanque, esperando encontrar escarabajos escondidos entre enormes encinas

Con la letra F
– Francisco frunce la frente

Con la letra G
– Gerard Giné giró gritando gol

Con la Letra H
– Helena hace hechizos

Con la letra I
– Iván imagina ilusiones

Con la letra J
– La leona lame los lindos leoncitos

Con la letra L
– La luna luce linda los lunes

Con la letra M:
– Mi mamá de mima mucho

Con la letra N
– Nada ni nadie nos necesita

Con la letra O
– Observé ocho ositos, osas, osos y oseznos

Con la letra P
– Para poder presumir practica previamente porque podrías parecer presuntuoso

Con la letra Q
– Quirina quiere queso

Con la letra R
– Rocío recibe regalos ricos, riega romero y recoge rosas

Con la letra S
– Sonia sonreía satisfecha, soñaba sentada sobre su sillón

Con la letra T
– Tomás tiene tres tíos

Con la letra U
– Un uruguayo utilizó utensilios urbanos únicos

Con la letra V
– Vi varios valencianos vendiendo violines, violas y violonchelos

Con la letra Z
– Zoe zarandea a Zaida