Frases hechas que usas todos los días sin darte cuenta

Es posible que no te hayas dado cuenta de las frases hechas que dices al día. De hecho, es seguro que dices más de las que eres consciente ahora mismo. Las frases hechas son una parte fundamental del lenguaje cotidiano ya que nos ayudan a comunicarnos mejor y a poder transmitir una idea con pocas palabras.

En ocasiones, a las frases hechas se les puede dar un significado negativo ya que hay personas que toleran mal que se usen con doble sentido o para ahorrar una explicación… aunque su uso es bastante cómodo.

Estas frases son tesoros de nuestro lenguaje y si alguien que no habla español intentase traducir su significado, simplemente… ¡no entendería nada! Porque son frases que nosotros entendemos, que sabemos su significado y que dicen mucho en pocas palabras.

Las frases hechas

Una frase hecha, es una expresión que se usa sin alteración en su contenido y que tiene un sentido figurado. Se usa comúnmente entre las personas que pertenecen a un mismo lugar debido a que son una comunidad lingüística. Estas frases suelen usarse en mitad de oraciones o un contexto en el que encajen según por lo que sucede en un momento dado, como por ejemplo: “‘Voy a tocar madera’ porque quiero aprobar este examen” o también: “‘No te duermas en los laureles’ que sino llegarás tarde”.

Las frases hechas tienen formas fijas y no se pueden sustituir palabras porque entonces perderían todo su significado, aunque las palabras sean sinónimas. Se deben decir tal cual son y cómo las tiene la lengua española catalogadas como frases hechas.

Diferencia entre frase hecha y refrán

Las frases hechas no tienen nada que ver con los refranes. Los refranes, que también deben decirse tal cual y no se deben cambiar las palabras ni por sinónimos porque entonces perderían su significado, tienen una moraleja que las frases hechas no tienen. Los refranes se utilizan para ejemplificar y reforzar una afirmación en concreto.

Ejemplos de refranes:

• “A caballo regalado no le mires el dentado”
• “A perro flaco, todo son pulgas” 
• “A quien mucho tiene, más le viene”

30 ejemplos de frases hechas

A continuación vamos a mostrarte una selección de frases hechas para que te des cuenta de que es más que probable que las uses cada día, y además qué significan cada una de ellas.

1. Tener salero. Una persona que tiene gracia.
2. Contigo pan y cebolla. Significa que con alguien que quieres no te importa ser pobre mientras estés a su lado.
3. Dar gato por libre. Cuando te han engañado y te han hecho creer que algo es mejor de lo que realmente es.
4. A la primera de cambio. Persona que aprovecha la primera oportunidad para conseguir algo aunque no sea moralmente aceptado.
5. Tener la sartén por el mango. Cuando se tiene el control de una situación en concreto.
6. Como quien no quiere la cosa. Alguien que disimula para no levantar sospechas cuando hace algo que otros no quieren que haga.
7. Irse de las manos. Cuando alguien deja de controlar una situación y se desborda.
8. Tener algo en la punta de la lengua. Quieres decir una palabra que conoces pero no te sale decirla y debes pensar mucho para recuperarla de tu memoria.
9. Echar más leña al fuego. Significa potenciar una situación conflictiva creando polémica.
10. Estás en la Luna de Valencia. Significa que no estás dónde estás, que tienes la mente en otra parte, como si estuvieras en las nubes
11. Montar un pollo. Cuando se monta una bronca sin venir a cuento con cierta violencia física o verbal.
12. La has liado parda. Es otra forma de decir que se ha montado un pollo, el significado es el mismo que el punto anterior, aunque podría entenderse con un poco más de agresividad.
13. Poner los cuernos. Cuando hay infidelidad en una pareja, es decir cuando se engaña a una persona en una relación sentimental con otra.
14. Tomar el pelo. Cuando se burla de otra persona o se le engaña diciendo una mentira.
15. Quedarse con la boca abierta. Es una forma de decir que te has quedado sorprendido con algo que ha pasado o que te han dicho.
16. Pasar la noche en blanco. Cuando te has quedado toda la noche despierto sin dormir.
17. Perder la cabeza. Cuando una persona no está dentro de sus cabales o mantiene un comportamiento fuera de lo común.
18. Costar un ojo de la cara. Significa que algo tiene un precio muy elevado, es decir, es muy caro.
19. Echar una mano. Se dice que se echa una mano a alguien cuando se ayuda a una persona a hacer algo.
20. Matar el gusanillo. Se utiliza cuando se tiene hambre y se pica entre horas (sin que sea la comida principal) para no tener tanta hambre cuando es el momento de comer o cenar. Es una forma de satisfacer el hambre de manera rápida.
21. Meter la pata. Se utiliza cuando una persona se ha equivocado o ha cometido un error.
22. Estar en Babia. Cuando una persona está distraída, no presta atención o parece como ausente.
23. No tener pelos en la lengua. Se utiliza cuando una persona dice las cosas claras y directas, en la gran mayoría de ocasiones, sin tener en cuenta lo que otros puedan pensar o sentir al respecto.
24. Hablar por los codos. Se utiliza esta expresión cuando una persona habla mucho y no es capaz de callarse ni en momentos donde debería hacerlo.
25. Ponerse la pilas. Poner energía en algo o en alguna situación para que se realice pronto o se busque una solución a un problema.
26. Tener salero. Se utiliza cuando una persona tiene gracia o don de gentes.
27. Ir a freír espárragos. Se dice cuando alguien te está molestando mucho o estás harto/a de otro/a y quieres alejarte de él porque te hace sentir mal.
28. Planchar la oreja. Se utiliza cuando te vas a dormir porque estás totalmente agotado.
29. Decir verdades como templos. Hace referencia a una persona que dice las cosas claras, siempre con verdades, sin tener en cuenta si puede ofender o no a alguien. La verdad siempre por delante.
30. Estar metida en el ajo (o en el fregado). Se emplea cuando se hace referencia a que una persona siempre está metida en problemas.

Estas son algunas frases hechas que seguramente utilices todos los días sin darte cuenta. Ahora que ya sabes cuáles son algunas de las más comunes, es probable que te fijes cuando las digas u otra persona las pronuncie.