Salud

Consecuencias del abuso en los niños

El impacto negativo en la salud mental del niño

[mashshare icons=»1″]

Consecuencias abuso infantil
Mª José Roldán

Mª José RoldánMaestra y Psicopedagoga

Desgraciadamente en muchas ocasiones salen a la luz casos de niños que han sido abusados por sus padres, por personas de su alrededor o por desconocidos. El impacto negativo del abuso infantil sobre la salud mental de adultos es algo que está documentado desde hace décadas, pero en los últimos 30 años hay estudios que documental la relación entre el abuso infantil y las enfermedades mentales en la edad adulta, unas enfermedades que si no hubiera habido abuso, muy probablemente no hubieran tenido lugar.

En la actualidad no hay un diagnóstico que describa los efectos psicológicos del abuso infantil, si no que muchos adultos que han pasado por abusos infantiles y están en los servicios de salud mental, son diagnosticados con otras condiciones psicológicas.

El impacto psicológico del abuso infantil

El impacto psicológico del abuso de un niño depende de una gran variedad de factores, incluyendo el tipo de abuso, la gravedad de los abusos, la relación del niño y del abusador, el entorno familiar, la relación con los padres u otras personas cercanas, si ha tenido experiencias previas de abuso, etc. Los factores pueden suavizar o empeorar el impacto del abuso en el bienestar psicológico de un niño y que exista las probabilidades de que desarrollen enfermedades mentales después de haber sufrido los abusos.

Consecuencias psicológicas asociadas al abuso infantil

A continuación podrás ver algunas de las consecuencias psicológicas más habituales que están asociadas con el abuso de niños.

Trastorno de estrés postraumático

El trastorno de estrés postraumático es una condición psicológica que se desarrolla después de que una persona haya sido dañada o expuesta a peligro y que han sido incapaces de protegerse a sí mismas. Este trastorno se desarrolla normalmente cuando la persona ha experimentado miedo y se ha sentido impotente (características comunes en el abuso infantil).

Depresión

La depresión es la consecuencia más común del abuso infantil. Las personas que están deprimidas pueden sentirse desanimadas por el futuro e insatisfechos con la vida. Pueden sentirse sin energía para hacer las cosas e incluso para salir de la cama, también pueden sentirse incapaces de concentrarse para comer o dormir normalmente. La depresión puede ocurrir como respuesta a las pérdidas pasadas o actuales. Sentirse mal con una tragedia como la pérdida de un ser querido, puede tener esta respuesta y ser temporal al tratarse de un duelo. El trastorno depresivo mayor sin embargo, se producen cuando las señales de la depresión están más de dos semanas y no tienen una razón aparente.

Abuso en los niños

Ataques de pánico

Cuando se siente miedo de una forma inapropiada puede aumentar la ansiedad y acabar en un ataque de pánico. Las personas que han sufrido abusos en la infancia son más propensos a experimentar ansiedad o ataques de pánico de forma frecuente.

Trastorno disociativo

Los trastornos disociativos se caracterizan por alteraciones en la percepción (despersonalización) del mundo (desrealización) o de los recuerdos. La amnesia disociativa se produce cuando un individuo es incapaz de recordar la información personal más importante, en situaciones más extremas se pueden formar nuevas identidades en la persona (trastorno de identidad disociativo).

Los niños que son abusados utilizan la disociación para escapar del miedo o del dolor de una situación dada. Cuando crecen y se convierten en adultos, utilizan esta forma aprendida para evitar dificultades en sus vidas que no se sienten capaces de realizar. Puede convertirse en algo automático para ellos y una parte importante de la recuperación es permanecer presentes mientras se enfrentan a la realidad del trauma.

Otras consecuencias del abuso infantil

Pero además, hay otras consecuencias también que pueden ocurrir después de que los niños sufran abuso como por ejemplo: trastorno bipolar, esquizofrenia, desórdenes de la personalidad o trastornos de la alimentación.

Todas estas consecuencias pueden ocurrir ante cualquier abuso infantil: físico, verbal, emocional, sexual, abandono…

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *